Campaña por el DIA MUNDIAL DEL SUELO 2018

Ciencia del suelo

 

El suelo es un recurso natural no renovable que cumple una serie de funciones básicas como: productividad y  mantenimiento de la calidad ambiental, preserva y mejora la calidad de vida de los seres vivos, nos proporciona materias primas, es soporte de las actividades humanas y guarda las señales de nuestra herencia cultural. El año 2015 fue declarado Año Internacional de los Suelos. En todo el mundo se llevaron a cabo multitud de eventos científicos y sociales en esta temática. La FAO, bajo el lema “Los suelos sanos son la base para la producción de alimentos saludables”, elaboró un informe destacando la necesidad de mejorar, proteger y conservar la calidad de los suelos y su funcionalidad con el fin de incrementar la producción y la seguridad alimentaria, ya que el 95% de la producción de alimentos en el Planeta depende directa o indirectamente de nuestros suelos. Además, de aquí al año 2050, debido al aumento de la población, es imperativo aumentar un 60% a escala global la producción de alimentos. Por otro lado, la eliminación y el reciclado de residuos junto con la conservación y protección de nuestros suelos son aspectos básicos para llevar a cabo de manera exitosa las directrices de la economía circular. Numerosos artículos científicos sugieren que la gestión sostenible del suelo podría aumentar la producción de alimentos sin perjudicar los recursos hídricos ni el sistema edáfico. Las prácticas agronómicas mejoradas incluyen el uso de enmiendas orgánicas como el compost, laboreo mínimo y el aprovechamiento de los residuos, entre otras. Estas prácticas también pueden ofrecer beneficios en forma de emisiones reducidas de gases de efecto invernadero, menor uso de fertilizantes y mayor almacenamiento de carbono en los suelos. Diferentes proyectos de investigación enmarcados en estas temáticas han demostrado que el manejo adecuado de residuos orgánicos mediante compostaje y el empleo adecuado del compost en agricultura, permiten lograr objetivos como: residuo cero, minimizar la emisión de gases de efecto invernadero, disminuir el uso de fertilizantes, incrementar la fijación de carbono orgánico, en línea con la iniciativa 4×1000 y mejorar la calidad del suelo y el rendimiento de las cosechas. Todos estos aspectos son básicos para el futuro cercano de nuestro planeta. Cumplir con estos objetivos ayudará a minimizar los efectos del cambio climático contribuyendo a la economía circular.

Por todo ello, y en este cinco de diciembre de 2018, declarado Día Mundial del Suelo por la Asamblea General de la ONU en el año 2015 (http://www.fao.org/world-soil-day/es/), este año bajo el lema: “Sé la solución a la contaminación del suelo”, la Red Española de Compostaje (https://www.recompostaje.com) se une a las iniciativas que llevarán a  cabo nuestros compañeros y amigos de la Sociedad Española de la Ciencia del Suelo con objeto de “sensibilizar a la ciudadanía sobre la gran amenaza oculta que afecta a nuestros suelos, así como visibilizar las posibles soluciones y medidas que individualmente podemos tomar para paliar los daños que la contaminación ocasiona en la salud humana y en los ecosistemas”.

Deja una respuesta